Equivocarse es de humanos, pero de sabios es aceptarlo y corregirlo. Una rectificación que esperan desde las federaciones de peñas del Cádiz y el Málaga, cuyos equipos se han visto afectados por los errores arbitrales. Los boquerones, conscientes de la dificultad de la labor del hombre de negro, han emitido un comunicado por los arbitrajes sufridos en los últimos partidos y en relación al último encuentro en la Cerámica, en el que los del Gato Romero se vieron perjudicados por Vicandi Garrido. En el mismo, piden «el mismo respeto que el resto de clubes» y subrayan que les mueve más la «actitud que la aptitud» del colegiado vasco.
En Cádiz entonan el basta ya. Los amarillos, al igual que sus vecinos, hacen referencia a la dificultad de arbitrar, una dura labor que equiparan con ver sufrir al equipo de sus amores. Por todo ello, desde la Federación de Peñas han propuesto una pañolada negra al comienzo del partido que se disputará en el Ramón de Carranza frente al Reus. Una iniciativa protesta que promueven desde el respeto, sin insultos pero llamando a filas, para que sepan que la corrección no conlleva que las ilusiones gaditanas queden reducidas a la mínima expresión.