Manual para evitar la violencia

Javier Torres Gómez, el que fuera futbolista del Real Valladolid, ha presentado un manual para evitar la violencia en el fútbol base surgido del banco de pruebas de la "Escuela de Padres Fútbol Base".

El exfutbolista Javier Torres Gómez junto al resto de colaboradores durante la presentación del manual. Ayto. de Valladolid
El exfutbolista Javier Torres Gómez junto al resto de colaboradores durante la presentación del manual. Ayto. de Valladolid

Javier Torres Gómez nació en Madrid pero hizo carrera en Valladolid. El futbolista, tras su retirada, pasó a ser coordinador de la cantera del Real Valladolid, segundo entrenador del primer equipo e incluso llegó a dirigir el filial blanquivioleta durante tres temporadas. Le gustaba el fútbol formativo. Un gusanillo que el exlateral derecho mató con el proyecto «Escuela de Padres Fútbol Base» y que culmina con la presentación de Escuela de padres en el fútbol base, queremos prevenir la violencia en el fútbol, un manual para evitar la violencia en el fútbol base.

Los recientes episodios de violencia entre padres de jóvenes futbolistas y su repercusión mediática dan mayor protagonismo al proyecto pero, según explican en declaraciones a El Norte de Castilla, no pretenden educar, sino sensibilizar. Se trata de dar respuesta a la demanda de los padres que durante meses han participado en la Escuela de Padres que dirige el propio jugador y que ha utilizado como banco de pruebas en los más de cuarenta talleres celebrados en la Escuela del Real Valladolid, dirigida por el también exfutbolista Alberto Marcos.

La misión que plantea Torres Gómez es conseguir que los padres se pregunten si su conducta es la más adecuada en este deporte, si están ayudando a su hijo o si su manera de comunicar es la correcta. Todo con un único objetivo: la educación futbolística y la prevención de la violencia.

Escuela de Padres

Se trata de una iniciativa impulsada por la Federación de Castilla y León que pretende evitar que los progenitores sometan a presión a sus hijos y otras actitudes reprochables. Los progenitores, advierten, no deben ser un elemento desequilibrante en el proceso de iniciación deportiva de sus hijos, sino «los verdaderos inductores del ambiente que propicie el desarrollo integral de sus hijos brindando su apoyo y comprensión».

________________________________________________________________________

Enlaces relacionados

Compartir
Artículo anterior«Menos pitar y más animar»
Artículo siguienteBarça, la historia de una errata
De joven jugaba al fútbol sin cansarme demasiado porque por las noches me sacaba el graduado. En la ciudad de Marbella crecía y vivía sin hacer mucho caso de la climatología. Sin comerlo ni beberlo llegue a Valladolid donde en periodista allí yo me convertí. Punto y aparte, me busqué las habichuelas en una lluviosa Londres y volví a Madrid para llegar a ser consultor, creativo y diseñador. Sobrevivo como soldado de fortuna en esta web.