Biri Biri, la leyenda que vuelve

Uno de los futbolistas más emblemáticos en la historia del Sevilla FC, Alhaji Momodo Njle, más conocido como Biri Biri, volverá a la capital andaluza gracias a la Federación de Peñas Sevillistas.

El mítico Biri Biri realiza un remate acrobático en un encuentro con la elástica del conjunto hispalense. Sevilla FC
El mítico Biri Biri realiza un remate acrobático en un encuentro con la elástica del conjunto hispalense. Sevilla FC

La Federación de Peñas Sevillistas rendirá homenaje al gambiano Alhaji Momodo Njle, más conocido como Biri Biri, mítico jugador del Sevilla FC en la década de los 70. El delantero fue el primer futbolista de raza negra en la historia del conjunto andaluz y para los hinchas del conjunto de Nervión es una auténtica figura de culto. Además, está considerado como el mejor jugador de todos los tiempos de Gambia.

Para ello, el presidente de la agrupación, Carlos Jiménez, ha escrito una carta al consulado de Gambia, expresando el deseo de rendir un sentido homenaje a su paisano. La intención es que el tributo se realice en la segunda quincena de mayo y que el exjugador participe en el mayor número de actos posibles.

La Federación ha puesto a disposición de todo el sevillismo un número de cuenta para que todos los que así lo deseen, puedan y quieran participar colaboren en sufragar los gastos que conlleva el traslado y la estancia de Biri Biri en Sevilla.

Leyenda viva

En el año 2000, Biri Biri recibió la Orden del Mérito por el presidente de Gambia Yahya Jammeh, y fue nombrado «mejor futbolista del último milenio y de todos los tiempos» del país africano. En la actualidad trabaja como funcionario del consejo de Banjul, aunque también tiene tiempo para entrenar a los más pequeños en una escuela de fútbol.

Desde su estancia en Sevilla es recordado como una auténtica estrella por su atractiva forma de jugar. El delantero africano desplegaba un fútbol imprevisible, con constantes mutaciones en ataque gracias a sus grandes facultades físicas.



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De joven jugaba al fútbol sin cansarme demasiado porque por las noches me sacaba el graduado. En la ciudad de Marbella crecía y vivía sin hacer mucho caso de la climatología. Sin comerlo ni beberlo llegue a Valladolid donde en periodista allí yo me convertí. Punto y aparte, me busqué las habichuelas en una lluviosa Londres y volví a Madrid para llegar a ser consultor, creativo y diseñador. Sobrevivo como soldado de fortuna en esta web.