Premio a la incondicionalidad

El Real Madrid alza cinco años después el título de Liga y lo hace arropado por todos los aficionados que se desplazaron a Málaga y los miles de ellos que lo celebraron en Cibeles.

Cinco años después volvió el Real Madrid de los títulos ligueros, el que no defrauda en las grandes finales, como la que vivió ayer en la Rosaleda. El mundo se rindió a Zidane, que se lleva el título y un récord a la espalda. El conjunto blanco ha marcado, por primera vez en toda la historia, en todos los partidos de LaLiga. Esta plantilla ha sido demoledora en el ataque y así lo han demostrado los números.

Los jugadores enloquecieron en el césped tras el pitido final y lo celebraron con los cientos de aficionados que se desplazaron hasta Málaga. La grada respondió, con una increíble fiesta, arropada con las grandes pancartas que desplegaron durante los 90 minutos. Estos fueron los privilegiados que pudieron sentir el partido en su propia piel, pero después fue el turno de los madrileños, los que esperaron durante horas en la Cibeles para festejar con sus ídolos en su emblemática fuente.

Toda la plantilla se mostró eufórica y dejaron momentos para la historia. Desde el baño a Zidane en rueda de prensa, que ya se ha convertido en un clásico, a la celebración en el vestuario y los cánticos en el avión. Todos se dejaron las gargantas entonando el «Hala Madrid» y no descansaron un segundo. Una vez se encontraron con su diosa llegó el baño de masas y la dedicatoria a la afición, como no podía ser de otra manera.


Allí volvían a encontrarse casi un año después, desde que los blancos les concedieron la undécima, y de nuevo les dedicaron a todas las miles de personas que rebosaron la capital la Liga cinco años después. Ahora toca pensar en la próxima cita el tres de junio, donde los jugadores ya cuentan con el apoyo de su grada incondicional.

____________________________________________________________________

Te puede interesar: