El Real Valladolid se juega una última bala para afianzarse en la clasificación. Si en los últimos partidos ha conseguido movilizar a toda su afición este no va a ser menos. El equipo ha luchado mucho para llegar donde está y por eso no ha dudado en echar el resto en la penúltima jornada. Los blanquivioletas se retarán ante un Reus que descansa en la mitad de tabla y buscarán la victoria para que el Huesca no le pise los talones, pues le sigue de cerca.
Paco Herrera ha analizado la situación de su plantilla y ha calificado de imperdonable que el equipo no demuestre en tierras catalanas lo mucho que se juega. Los jugadores tan sólo necesita un empujón y deberán escuchar a la grada para sentirlo. A los blanquivioletas les quedan dos finales y sólo piensan en la posibilidad de vencer. “Aún no tenemos los deberes hechos y solo pienso en ganar en Reus, es lo único que me importa. Después ya veremos qué ha sucedido en otros campos pero tenemos claro que si nosotros ganamos todo lo demás importará menos”, sentenció el técnico.
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