Arturo González: «En el gallinero la afición está apartada y no ve bien el fútbol»

Arturo González es el presidente de la Federación de Peñas del Leganés. "Los jugadores de Primera no se preocupan siquiera de la afición"

Presidente Federación Leganés

Arturo González es desde junio de 2019 el presidente de la Federación de Peñas del Leganés, integrada por 10 agrupaciones. Antes de llegar a la presidencia, fue vicepresidente. «Los futbolistas entienden un poco más la importancia de las peñas en los clubes pequeños».

—¿Qué proyectos tiene su federación a corto y medio plazo?

—A corto, las comidas de hermanamiento, los viajes, la segunda edición de la carrera contra el cáncer, la gala que hacemos anual… El resto de cosas ya las hemos hecho.

—¿Qué futbolista de su club se merecería una peña?

—Este año está la cosa complicada. No le pondría ninguna peña a ningún futbolista. Mantovani la tuvo en su día, pero los jugadores van y vienen. Un reconocimiento como antiguo jugador sí se lo haría a Mantovani. También a Asier Garitano, aunque ahora esté en otro club.

—¿Los futbolistas entienden la importancia de las peñas en la vida del club?

—En un club pequeño como éste un poco más que en los grandes equipos. En Primera División, están en otra liga y no se preocupan siquiera de la afición.

—¿Cuál es el futbolista más comprometido con las peñas?

—En Leganés no podemos tener queja con Bustinza, Eraso, Szymanowski… Los capitanes nunca nos han dicho que no a nada. Ellos están mucho más comprometidos que los jugadores nuevos.

—¿Qué le gustaría que el club hiciera por ustedes?

—Cualquier cosa en la que nos requieren les echamos una mano. Cuando les pedimos algo lo hablamos. Tenemos una buena relación con ellos.

—¿En qué campo contrario son ustedes mejor recibidos?

—En bastantes. Salvo la eliminatoria de Copa que jugamos en Sevilla hace un par de años, en la que tuvimos problemas, y en Getafe, por la rivalidad, no tengo queja de ningún estadio. La afición es bien recibida y hay buen ambiente con el resto de las peñas.

—Dígame el nombre de una peña ejemplar de su federación.

—Por el número de socios que son y por cumplir diez años, diría la Peña Orgullo. Si no, diría la mía.

—¿Cuál es el viaje más complicado que han hecho?

—Las semifinales de Copa de hace dos temporadas en Sevilla. Viajamos cinco autobuses y nos apartaron en un polígono. En la ida, en Butarque, algunos aficionados sevillistas introdujeron bengalas. Habíamos estado varias veces allí y no habíamos tenido problemas. Sin embargo, nos dejaron en un polígono hasta poco antes de empezar el partido. Nos retuvieron entre dos y cuatro horas en un polígono a 400 aficionados. En el partido no pasó nada.

—¿Con qué peña de otro club se cambiaría la bufanda?

—Con todas.

—¿Qué significa para ustedes formar parte de Aficiones Unidas?

—No solamente nos conviene estar por los precios que se pactan con otras federaciones y con LaLiga, también te pone en contacto con el resto de las aficiones.

—¿Cree que en el fútbol español se respira buen ambiente?

—Mayoritariamente sí, pero en todas las aficiones hay algún cafre que no va al fútbol a verlo, sino a dedicarse a otras cosas.

—¿Qué peña organiza las mejores quedadas prepartido?

—División Blanquiazul. Hace dos o tres quedadas al año increíbles e invita a todas las peñas. También a las visitantes.

—¿Por qué hay que ubicar a las aficiones rivales en el gallinero de los estadios?

—Habría que preguntárselo a los que deciden. Yo no estoy de acuerdo, sobre todo por las medidas de seguridad actuales con todas las cámaras que hay. En el gallinero, la afición está apartada y no ve bien el fútbol.

—¿Cuál es la actividad de las mujeres en la vida de las peñas? ¿Hay alguna femenina?

—Femenina no. En la directiva, hay mujeres. Cada vez están más metidas en las peñas, colaborando y participando.

—¿Cuál es la edad del peñista más veterano? ¿Y la del más benjamín?

—Hay peñistas con meses, uno o dos años. El más veterano no lo sé, pero tenemos gente en torno a los 80 años.