Leganés ha sido una de las ciudades más atacadas por la COVID-19 y la Federación de Peñas del club lo sabe bien. Desde el primer momento, se han involucrado en diferentes acciones solidarias para poder solventar los problemas causados por la crisis sanitaria.

Una de estas actividades fue el reparto de 10.000 mascarillas a los niños y las niñas de los colegios de la localidad durante tres meses. La posible falta de un producto tan necesario hoy en día unida a la dificultad de realizar alguna otra campaña durante las fechas de Navidad como viene siendo habitual, hizo que la Federación volcara todo su esfuerzo en esta campaña.

La adquisición de estas mascarillas se financió directamente con fondos propios de la Federación de Peñas, quienes se pusieron en contacto con las distintas Asociaciones de Madres y Padres de los colegios para poder llevar a cabo el reparto. Fueron muchas las Peñas y personas implicadas en esta tarea que tanta alegría trajo consigo.

No obstante, es solo un ejemplo más de todas las acciones que vienen realizando durante años y que han aumentado desde el inicio de la pandemia. La Federación donó un camión de agua al hospital cuando fue necesario, pasatiempos y autodefinidos al Hospital Severo Ochoa para amenizar la estancia de los ingresados y crearon, incluso, una campaña para enviar cartas de ánimo a todos aquellos pacientes que permanecían aislados.

El trabajo de la Federación de Peñas del CD Leganés es sin duda admirable. Demuestran, al igual que otras muchas federaciones, que el fútbol es mucho más que un deporte. Es algo que une a personas, mueve sentimientos y genera esperanza allá donde va.