El Zaragoza tiene mucho que celebrar. El conjunto maño se llevó a casa los tres puntos, con un contundente 1-3, y allí estuvo su afición para corroborarlo y celebrarlo. Sin dejar de cantar. Se vendieron más de 400 entradas visitantes en Alcoraz y así se sentía en la grada. Los cánticos de las peñas no cesaron en todo el encuentro y se fundieron con las voces oscenses, con las que están hermanadas.
Ambas aficiones se reunieron en la previa al partido para comer y celebrar lo que estaba a punto de pasar. En esa amistosa velada, la peña «Fenómenos Oscenses» tuvo el detalle de entregar a la Federación de Peñas del Zaragoza unos cuadros conmemorativos de aquel día, para guardar siempre un buen recuerdo.
En el campo cambian las tornas. Cada afición se dejó la garganta por los suyos y el premio gordo se lo llevaron los aficionados del Zaragoza, con chaparrón incluido. A punto estuvo de aplazarse el partido, al igual que ha pasado con el Celta vs Real Madrid o el Deportivo vs Betis, debido a las fuertes lluvias que está viviendo el panorama nacional.
A pesar de la tromba, sus ánimos no ‘hicieron aguas’ y el sonido ambiente de Alcoraz fue atronador. Los jugadores de Agné agradecieron el apoyo de todos los que se habían desplazado y acudieron a saludar después del pitido final.
La próxima vez que vuelva a vivirse este ambiente de fútbol en un derbi aragonés podría ser en los playoffs para conquistar los puestos de primera. 
Seguro que ambos conjuntos estarán ansiosos de poder volver a reunirse en esta atmósfera de compañerismo y que se cumplan los versos que entonaron: «El invierno ha sido malo, llegará la primavera y tu y yo nos veremos en los playoffs de primera».
