Viajar, menudo placer. Descubrir lugares nuevos y culturas diferentes. Experimentar sensaciones y estar presente en lugares que no creeríamos ver jamás. Estar frente a un monumento famoso, o rodeado de personas diferentes físicamente con un lenguaje radicalmente distinto.
Imaginémonos que hemos cogido un avión, hemos surcado el cielo durante unas 30 horas en total para llegar a un lugar paradisiaco, pongamos Tailandia, que ahora está muy de moda. Como buenos españoles y aficionados vemos los partidos de nuestro equipo desde la distancia y los disfrutamos a solas. Ahora, ¿y si encontramos a alguien en ese lugar tan recóndito del planeta que siente nuestra misma pasión?, ¿no sería algo increíble para compartir?
Esto es lo que le pasó a un peñista valencianista de Viachers en su singular viaje por la costa tailandesa. Decidió entrar en un bar con Wi-Fi para poder ver un partido contra el Córdoba CF, y allí encontró al camarero que, a pesar de ser nativo de la localidad en la que se encontraba, era aficionado al Valencia CF desde la distancia.
Y es que el fútbol cruza fronteras y se adentra en los corazones de incluso quienes viven en la otra punta del mundo y no tienen ningún punto de conexión con nuestro club. Esto es lo que realmente le da sentido a un viaje al final, los pequeños momentos que compartimos y que se nos quedarán siempre anclados en el recuerdo.
BLOG @VIACHERS | «ValenThai» Clud de Fútbol ? por @andresestrela ? https://t.co/FpfNoS3Tmd
?✈ ¿Un valencianista en el rincón más inesperado? Sí, se puede!
Amunt @valenciacf ??? pic.twitter.com/tfoI2eZVNS
— VIACHERS VCF (@viachers) 5 de diciembre de 2017