Sevilla: «Animar no es insultar»

El Sevilla FC ha difundido un comunicado en el que apuesta por el juego limpio y defiende un Pizjuán tolerante que lleve en volandas al equipo sin recurrir al insulto o a acciones vejatorias hacia el rival.

Las gradas del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán muestran mensajes de tolerancia hacia la afición rival. Sevilla FC
Las gradas del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán muestran mensajes de tolerancia hacia la afición rival. Sevilla FC

El Sevilla FC aboga por la cordialidad entre aficiones. El conjunto hispalense ha difundido un comunicado en el que transmite a su hinchada el deseo de que disfruten de la cita liguera frente al Granada CF (sábado 21, 21.00) y del colorido único del Ramón Sanchez-Pizjuán, desde el respeto y la tolerancia hacia su rival. «El fútbol es un espectáculo pasional, pero en él no caben actitudes violentas o discriminatorias de ningún tipo, fundamentalmente porque animar no está reñido con respetar al contrario. Animar, en definitiva, no es insultar ni insultar es animar», señalan.

El club recuerda a sus aficionados que se puede animar y hacer de Nervión una caldera  que lleve en volandas al equipo sin recurrir al insulto o a acciones vejatorias hacia el rival. «Hacer lo contrario supone manchar los valores tradicionales del club y de este deporte en su conjunto, que tanto bien han hecho a la sociedad. La tolerancia y el respeto entre los aficionados son parte inherente del fútbol, al igual que la animación, sin excluir una cosa de la otra», afirma la entidad andaluza.

Proyecto Cordiality

Asimismo, desde hace más de un año desarrolla el proyecto Cordiality, con el que busca fomentar la tolerancia en el fútbol, reforzando el traslado de valores positivos del deporte como el esfuerzo, la unión y el equipo, además del respeto y la convivencia pacífica entre aficionados de diferentes colores.



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De joven jugaba al fútbol sin cansarme demasiado porque por las noches me sacaba el graduado. En la ciudad de Marbella crecía y vivía sin hacer mucho caso de la climatología. Sin comerlo ni beberlo llegue a Valladolid donde en periodista allí yo me convertí. Punto y aparte, me busqué las habichuelas en una lluviosa Londres y volví a Madrid para llegar a ser consultor, creativo y diseñador. Sobrevivo como soldado de fortuna en esta web.