Que el apelativo de la ciudad de Granada, y no el del Granada CF, cope el título de este artículo no es casualidad. El pasado sábado, el club consiguió el ascenso a Primera División. Sin embargo, el resultado de este éxito colectivo lo disfrutará especialmente su fiel afición. Al igual que la ciudad de Granada, que tras la permanencia del club de baloncesto en la ACB y el ascenso del Granada CF, la temporada próxima será una de las únicas seis urbes españoles con un club de fútbol y otro de baloncesto en la élite.
Yendo al deporte rey, que es el que nos incumbe, el 27 de mayo de 2023 ya forma parte de la historia dorada del granadinismo. A eso de las once de la noche, tras vencer 2-0 al Leganés, el Granada CF se convirtió en uno de los veinte componentes de la próxima edición de LaLiga Santander.
Un recibimiento a la altura de la cita
La tarde comenzó mucho antes. La Asociación G19 Peñas del Granada CF convocó para las 18:45, algo más de dos horas antes del partido, un recibimiento masivo ornamentado por un pintacaras en los aledaños del estadio. La acogida de la convocatoria superó todos los pronósticos y miles de aficionados espolearon a los suyos en la entrada al estadio.
Ante este contexto parecía difícil que los pupilos de Paco López fallaran en los noventa minutos que les separaban de la vuelta al Olimpo del fútbol. El chaparrón previo al partido, unido a un gol anulado al Leganés, hizo aparecer algunos fantasmas. Pero el susto dio paso a la ilusión en cuanto el pichichi Uzuni abrió la lata. A partir de ahí, el Granada puso la directa no solo hacia el ascenso, sino hacia el título de campeón.
Con el pitido final se confirmaron tanto el ascenso como el campeonato liguero. El capitán Víctor Díaz fue el encargado de recibir el trofeo que así lo acreditaba, dando el pistoletazo de salida a los festejos granadinos. Unos festejos especialmente bonitos gracias a los preparativos del club y a que la ejemplar afición nazarí respetó la petición de no saltar al campo al término del encuentro.
Celebración sobre el campo y a la Fuente de las Batallas
Durante la celebración en el césped, los aficionados pudieron escuchar el clásico “We are the champions”, ver fuegos artificiales, abrazarse con los ídolos que se acercaron a la grada, ¡e incluso ver la petición de matrimonio del héroe Uzuni a su novia!
Posteriormente, jugadores, cuerpo técnico y directiva se acercaron a la Fuente de las Batallas en un autobús diseñado para la ocasión. Ya en la icónica fuente, ayudados por una grúa, izaron la bandera rojiblanca en lo más alto de la misma. Uzuni y Puertas se atrevieron incluso a darse un baño en el contraste entre el frío de la noche y el calor de su afición.
El domingo, Granada amaneció más tarde de lo habitual tras una noche en la que los festejos sustituyeron al sueño. En cualquier caso, lo más importante es que amaneció con un cambio de status tras el ascenso del equipo de fútbol que abandera a la ciudad. Los granadinistas ya pueden gritarlo: ¡Granada es de Primera!
